viernes, 30 de diciembre de 2016

MARCHA DEL DESCONSUELO MATUTINO

 Allá lejos se ve una estampida de espíritus que peregrinan. Todos habían sido desterrados por la muerte y enviados a deambular cada primer día de la semana hacia los túneles de aquel cementerio sobre ataúdes grupales rodantes. Si observas atentamente sus pálidas caras, puedes ver los lamentos contenidos en sus miradas perdidas y esquivas entre sí. Una vez me tropecé con uno de estos seres y sentí su gélido andar entre las estaciones y no pude hacer más que ofrecerle una sincera sonrisa a aquel ente con la esperanza de que desertara del limbo en el que se encontraba.

lunes, 5 de diciembre de 2016

MEMORYLAND

 A veces se nos olvida vivir en el presente y divagamos en el suave perfume del ayer. Nos fugamos del abrumador hoy y nos escondemos en los recuerdos ficcionados del ayer que tiene matices de perfección. Es allí donde el sol siempre nos ilumina cálido como un abrazo eterno. ¿Recuerdas una vez que fuimos felices? ¿Están en tu memoria las mismas imágenes que rondan hoy mis atardeceres? El vuelo lo emprendiste sola sin mí. Al parecer mis heridas fueron más profundas que las tuyas, yo no pude volver a surcar los aires, pero tu si, tú te fuiste con las brisas de la primavera, volaste muy lejos por sobre las montañas y los bosques. Yo me quedé inmóvil pensando que volverías por mí, aun miro por las noches hacia el sur por si la ventisca del ocaso te trae de vuelta a nuestro hogar. Hoy estás a kilómetros del nosotros, pero a un metro del ustedes y en este triángulo de pronombres el yo quedó fuera de lugar. Pero te equivocas si piensas que ya no te tengo, te equivocas si crees que ya no te puedo tocar, te equivocas si asumes que ya no te puedo sentir. Existe un lugar en el que aún aprisiono tu ser. De ese lugar tus alas perfectas ahora no te pueden liberar, en este paraje eres mi prisionera y estás cautiva a mi voluntad. Yo soy el soberano y tus vaivenes no serán mis carceleros. Es en este lugar donde habito cuando los segundos y minutos del presente me acorralan y asfixian, allí la inclemente verdad no me intenta convencer de lo que mi corazón se rehúsa a creer. 

martes, 8 de noviembre de 2016

SUS ESPINAS

Allá lejos en una tierra baldía
Donde el oxígeno era un bien muy escaso,
Dormía una flor cuyo faro interior no se encendía
Fue en esa noche, que se inauguró su ocaso.

Se había quedado dormida sola
Pues sus pétalos la habían abandonado
En medio de aquella batahola
Y sus espinas encallaron cual lema bordado.

No se le puede acariciar sin que sus espinas te lastimen
No se le puede mirar sin que sus raíces remuevan la tierra
No intentes tocarla sin ocultar el crimen,
Crimen que sin mediar palabras nos aterra.

Flor carente de sentidos encuentra pronto tu quietud perenne
Y deja de lastimar a quienes te quieren ver colorida nuevamente
En tu oasis de sanidad sin que nada te desenfrene
O te arrastre hacia una punzante pendiente.

Del aire, del sol y del agua te han privado
Y aprendiste a vivir sin aliento
Pero aun cuando ya todo te han quitado
Tus espinas te protegen del cruel viento
Y quizá sean las únicas que no te abandonen
Porque en las horas finales
Serán ellas quienes te perdonen
Y lleven tu frágil cuerpo por los eternos caudales.

lunes, 31 de octubre de 2016

LA TUMBA NÚMERO QUINCE


   En el tercer callejón pasado la entrada se encuentra la tumba número quince. La gente dice que allí descansa don Aurelio San Martín, un buen hombre que había fallecido a sus 40 años, luego de un mortal cáncer. La tumba estaba habitada desde hace 15 años, según recuerda el cuidador de ese sector. Lo que más le llama la atención es que todos los días, siempre antes del anochecer, una anciana visita aquella lápida y posa sobre ella un ramo de rosas con colores mixtos. Según cuentan los vecinos, esa mujer es doña María Norambuena, viuda de don Aurelio, y desde el día de su muerte, siempre lo visita en su nueva casa. La gente piensa que doña María nunca lo pudo olvidar, y según se oye en los pasillos, ella intentó quitarse la vida en reiteradas ocasiones. Sus muñecas expuestas exhiben marcas moradas y rojas, su pelo cubierto de escarcha invernal y en su mirada, el sol ya no se posa más. Doña María siempre lleva consigo un libro que lee en voz alta frente a la hierba que cubre aquel nicho y si la oyes, puedes jurar que se lo lee a alguien. Muchas veces los nocheros habían intentado sacarla del tercer callejón para poder cerrar el cementerio, pero la anciana siempre lograba salirse con la suya y quedarse más tiempo.
Un día, el gerente del cementerio comentó que ya había pasado mucho tiempo y que las cuotas seguían impagas por lo que decidió cambiar de lugar el sepulcro de don Aurelio y moverlo a la fosa común que estaba en el fondo de aquel lugar. – Si usted no paga, no tiene derecho a descansar gratuitamente – es lo que solía decir el gerente. Y sin otra parsimonia, un día los trabajadores acudieron con sus palas y picotas a remover aquel inerte ser, para que su lugar fuese ocupado por un nuevo arrendatario. Esa tarde y a la misma hora de siempre, la anciana se acercó a la tumba quince y no encontró a su marido por lo que su llanto se transformó en un eco sobre las paredes mohosas del tercer callejón y sus sollozos anidaron en la hierba y se adhirieron al granito. El cuidador asustado por aquel lamento ensordecedor acudió al lugar, pero no la encontró. Buscó y buscó por todos lados hasta que decidió ir a la fosa común en la parte de atrás. Tal fue su sorpresa al llegar a ese lugar cuando solo vio un ramo de rosas de colores mixtos que cubría la tierra fresca removida y muchas hojas de un libro repartidas por todo el sector, pero no había rastro alguno de la anciana, solo un susurro que recorría el lugar como una pena flotante en el aire.

martes, 27 de septiembre de 2016

APARECIÓ CON EL VIENTO

Ayer el viento de primavera me devolvió la suave melodía de tu voz
Vino flotando tal golondrina hacia algún punto austral
Más no sé si tu canto rompió este silencio feroz
O si sólo desenterró nuestros espíritus de forma accidental.

Justo cuando el silencio se había convertido en un aliado más
Fue cuando esta guerra de humos resurgió cual inmortal sediento de vida
Y ya no tendremos esta ausencia sonora por tanto el vacío tu llenarás
Con toda esta tregua fallida
Que con su bandera blanca como estandarte te llevarás
Toda evidencia destruida.

Atención, se cuidadoso, que desde lejos se oye,
Atención, se cuidadoso, que desde lejos se ve,
Atención, se cuidadoso, que desde lejos se percibe,
Ese aroma al ayer
Y no cedáis a su tentación
Se valiente y resiste la corriente
Ten cuidado con su aguijón
Que regala veneno indiferente.

¿Acaso no sabes cómo enfrentarte?
¿O será que olvidaste con tu memoria quebradiza?
Que aquella melodía llegó incluso un día, a tumbarte
No olvides por favor que, aunque aquel eco se suaviza
Tus ropajes e ideas conscientes desaparecen hasta desnudarte.

miércoles, 21 de septiembre de 2016

SOL DEL HORIZONTE


Esperanza por tu luz en las mañanas
Que apartas el frío de la madrugada cruel
Soy testigo de todo esto por mi ventana
Cual espectador vigilante y fiel.

Una ofrenda de silencio selló nuestros labios
Más el corazón detonaba por clamar su oposición
Esa fue la decisión de aquellos sabios
Que atendimos sin poner objeción.

La primavera nos visita como todos los años, pero ambos sabemos que también partirá
Alejémonos de sus coloridos vestidos y plumajes de seda,
Evitemos su profundo amanecer que acontecerá
Pará así, al menos, abandonar nuestros latidos en veda.

Tu presencia, tal augurio inminente se desvanece
Vuelve una y otra vez a este paraje que renunciaste
Tú, mi sol del horizonte, vives y pereces
En tu búsqueda del rumbo que fijaste
Lejos de estas ruinas que solían ser una gran fortaleza
Hoy, nuestra mirada se posa sobre el oeste
Y sin ánimo de generar tristeza
Te hundirás en el océano cueste lo que cueste.


sábado, 17 de septiembre de 2016

CON LOS MUERTOS NO SE JUEGA

  No recorras los cementerios bajo la luz de la luna. Deja en paz a esas almas somnolientas. No remuevas la tierra ni oses a destruir las flores que amanecieron sobre el cuerpo durmiente. Hace un par de veranos atrás el cortejo se veía por toda la ciudad cuando La oscura caravana recorrió 13 kilómetros para colocar el cuerpo caducado en su cofre perenne. ¡Por favor! no desdigas esas plegarias vociferadas al vacío y deja que las palabras reposen en las nubes. El hielo cubre tu umbral y ya la primavera nos saluda desde el horizonte del ayer. El ayer debe quedarse en su lugar, el presente no debe buscar asilo en antiguos rituales ya extintos, la neblina del porvenir del camino cesa tu andar aun a pesar de tu resolución. Mañana caminarás por sobre la hierba matutina y el frio no será el mismo que aquella vez, el cálido resplandor de tus ideales será suficiente para recordar el por qué a los muertos hay que dejarlos descansar y no perturbarlos.

miércoles, 31 de agosto de 2016

A QUIÉN YACE FRENTE A MÍ

Hoy no es un día triste, ignora el frío de agosto. La densa niebla es común en esta fecha. Recuerdo que nunca te gustó el gélido amanecer. Qué ironía partir junto con el alba. Los pocos que te querían están acá y el resto siguió con su rutina. Madera de sauce eligieron para tu lecho, quizá porqué sabían que esa madera estaba muy conectada con el eterno manantial azulado. Tampoco había flores porque cortarlas para decoración te parecía un pecado. Sólo había un objeto que te era muy preciado y que te negaste a heredar. El único valor que tenía era en el reino de los recuerdos.

martes, 9 de agosto de 2016

AQUELLO QUE DORMÍA


    Nos callamos y nos rendimos. Los discursos dejaron de existir. El silencio se oye más fuerte que nunca. Tu aroma arde en la remembranza. El albor de tu sonrisa quema mi retina a pesar de tener mis parpados en sueño. El anhelo de tu voz aprisiona la esperanza rebelde. Hace solo una semana atrás las flores fueron removidas junto con la tierra baldía y la tumba se sacudió. Era revivir esa incómoda parsimonia a la que asistimos en el pasado. Aquello que dormía hoy despierta y exige atención. Esos débiles músculos no son capaces de sostener tamaña verdad, la conciencia se tornó cromada y a lo lejos se escuchó un crujido que tenía aires de presente.  

domingo, 31 de julio de 2016

ELEGIDOS


  Siento un ruido que se acerca. El piso tiembla y retumba al morir cada segundo. Es un estruendo que viene desde el suelo y me desestabiliza. Miro entre el gentío, pero nadie devuelve la mirada, solo un perro nota mi desesperada búsqueda. No es un animal agraciado, su pelaje se ve descuidado y algo tiñoso, como si alguien lo hubiese olvidado en la calle y las crueles temperaturas de las ciudades hubiesen herido su piel. Aquel animal lucía viejo y enfermo, no había luz en su mirada, más sentí pena por él. De pronto, su mirada cambió drásticamente de rumbo. Se dirigió hacia el terror y sus ojos destellaban de pánico hacia la mía. Me observaba y yo podía ver que entendía cuáles eran mis aflicciones. Aquel ruido entonces se hizo ensordecedor hasta el límite de alterar mis latidos. Fue cuando entonces el perro y yo comprendimos que habíamos sido escogidos por la muerte para ser sus invitados de honor.

domingo, 3 de julio de 2016

LA DESPEDIDA

 Ella caminaba acompañada de otro hombre. Se veían felices. Sus cómplices miradas tenían un brillo secreto. El sudor quedó atrás, el fervor anidó en aquella cama neutral, sus sortijas se mantuvieron bien guardadas en los bolsillos interiores, ambos celulares desviaron cualquier llamada, las caricias y besos quedaron ocultos de la luz del día. Al despuntar el alba, ella se despidió con un cordial abrazo y condujo hasta su trabajo en los tribunales, él, por su parte, tomó el primer bus que apareció y fue a desayunar con su familia, sus hijos ya tenían todo listo para que él los fuese a dejar al colegio.

viernes, 24 de junio de 2016

PEDRITO DE PERÚ

   Nació en Chiclayo y estudió leyes en Lima. Luego viajó a Santiago a trabajar de mesero en un bar de Mapocho. Pedrito trabaja de sol a sol. Su jefe dice que es un flojo. Sus compañeros de pega bromean por su particular acento cantadito. Cuando los fines de semana agarra el escobillón y su tacho de basura, las señoras de las 4x4 lo miran con desprecio. De vuelta en el metro, al pasar por Baquedano, los demás trabajadores santiaguinos se molestan por su olor a sudor. Cada noche debe zigzaguear por las calles para llegar a su cité, los neonazis de Bandera son cosa seria. A pesar de todo, Pedrito le reza a su virgencita cada noche y da gracias por vivir en el país en el que se quiere al amigo cuando es forastero.

domingo, 1 de mayo de 2016

SU PERFUME

  Me paralizo y los recuerdos que me visitan son cada vez más reales. La lluvia golpetea sobre el techo. El olor a sopaipillas se mezcla con el de Antonio Banderas Golden. Ahora hay más voces que en un día normal. Hoy son ocho platos en vez de cinco. Más calor para cada pieza en este invierno húmedo. - Donde comen cinco, comen ocho - dijo mi mamá cuando aceptó. Otra vez se salió el canal, mi mamá y mis hermanos mayores pasaron toda esa noche limpiando y secando la casa. Todos ayudaron menos uno. No soy fanática de los perfumes, pero Antonio Banderas Golden no será fácil de borrar de las heridas de mi cuerpo.

martes, 19 de abril de 2016

TU CRUZ

  Pasada la medianoche mi mente moraba un lugar lejano y olvidado, en la penumbra que dejó aquella vela que se extinguió. Pernoctando frente a la débil fogata que hice con unos maderos que encontré camino a casa y que de seguro seguían húmedos por el aguacero que terminaba y que nos daba un respiro. Tu nombre brotó de entre las cenizas y quemó la superficie de metal en la que se encontraba, los maderos húmedos avivaron el ardor de tu mención, el fuego ardía no sólo en aquella fogata, sino que también ardía dentro de mi pecho, pero no quemaba ni ofrecía calor alguno, por el contrario, el gélido incendio escarchaba el asilo de mi corazón, una llaga brotaba en ese lugar y paralizaba la respiración. La cicatriz tal perenne habitante floreció nuevamente y extendió sus tibios brazos a todo mi cuerpo. Tu cruz la cargué hace mucho tiempo y la deposité en aquel páramo que habíamos acordado para que ningún otro visitante la adornara con flores frescas que luego marchitarían. Lejos de toda vista, tu cruz aguantó las arremetidas del deterioro del tiempo. Nunca pensé que hoy, frente a esta fogata con aroma a tierra húmeda, tu cruz volvería a estar intacta dentro de mi habitación.

jueves, 31 de marzo de 2016

LA NUMBER ONE


 Había dejado todo listo para esta noche. Intenté arreglar cada detalle para que mis pequeños disfrutaran de esta fecha. Me pasé el día en las compras de última hora y aguanté horas bajo el sol buscando uvas, arroz y una moneda antigua. Como de costumbre, el llegó tarde y ni siquiera notó algo de lo que había preparado, pero esta vez no fue como las anteriores. Debí dejarlo lejos de su vista luego de cortar la carne para la cena. Esta vez fue más que morado, fue un mar rojo intenso. Nunca pensé que sería la primera del año.

martes, 16 de febrero de 2016

LA RARA

   Mírala allí como se desliza entre la gente con su andar preocupado. Cada vez que debe pasar entre un grupo de personas, pide permiso con una voz humilde. Como si el permiso fuera algo obligatorio. Miren todos a la rara que se pasea entre la muchedumbre capitalina y que esquiva los hombros de los demás. Rara mujer de mirada sumisa, su voz se quiebra al exigir sus derechos. Una y otra vez recibe empujones y golpes de los viajeros apilados unos sobre otros en los vagones que avanzan saturados de jaurías de terno y corbata y de bandadas de vestidos coloridos. Una vez, la rara se puso de pie para ceder su asiento a un anciano que lucía una fisionomía agotada por el turno extenuante que acababa de terminar. Claramente las personas que la rodeaban le regalaron su desprecio por tal fechoría realizada. Otro día, se le vio tomar de la mano a un ciego para ayudarlo a cruzar la calle, a la rara le gustaba perpetrar tamañas jugarretas. Por suerte, ya pasadas varias tardes de verano e invierno, la rara salió de su casa en busca de nuevos crímenes, en su camino al trabajo dobló la esquina como muchas veces lo había hecho antes y 2 hombres se cruzaron frente a ella e intercambiaron unas palabras. Estos caballerosos seres le quitaron todas sus pertenencias y gentilmente acabaron con su vida, dejándola así a la intemperie y en la desolación. Benevolente fue la acción de estos 2 bienhechores pues la rara merecía el repudio de todos nosotros en este zoológico de cartón. 

sábado, 16 de enero de 2016

RETRASO

  Una sopa fría sobre la mesa y un ramo de flores frescas recién cortadas del jardín que tanto te gustaba. Yo veía las noticias sin prestar atención, solo necesitaba algo de ruido en esta silente habitación. Tu silla aún estaba en la misma posición que quedó en la mañana cuando partiste hacia el trabajo. Recuerdo que antes de salir me regalaste un te amo que escuché entre sueños. No te respondí, la rutina de un nuevo día laboral me aseguraba que pronto tendría otra oportunidad de hacerlo. Inútiles fueron las llamadas a tu celular, la voz de la operadora fue la única que respondió a mis insistencias. El ruido del televisor me despertó, abrí los ojos y noté el mensaje en la pantalla que mostraba la programación del próximo día a comenzar. Los minutos se hicieron distantes y las horas parecían difusas. Entonces, de la nada el teléfono retumbó en mis oídos, lentamente me acerqué para levantar el auricular, extrañamente las piernas se tornaron débiles y me costaba avanzar, mi corazón presentía lo que mi ser no quería oír. Aló fue la única temblorosa palabra que salió de mi boca y desde el otro lado se escuchó una voz monótona y procedimental que preguntaba por mi nombre y si es que te conocía.